En muchas clases de yoga, escucharás a los instructores decir, “Get into mountain pose” o “get into tadasana”, con el término en sánscrito. Sin embargo, si tomas clase con Yizza Galdamez en uno de los parques de Hartford, es posible que escuches un tercer idioma al ella invitar a sus alumnos a adoptar “la postura de la montaña”.
Galdamez es la directora general e instructora bilingüe de Yoga In Our City. Este programa de parques urbanos ofrece clases de yoga gratuitas durante el verano en Bridgeport, Hartford, New Haven y Waterbury, aunque Galdamez imparte clases principalmente en la capital.
“Crecí en Hartford, así que para mí es importante estar aquí”, expresó Galdamez. “Cuando me di cuenta de que [el yoga] me estaba ayudando de una manera inesperada, quise compartirlo”.
El yoga era algo desconocido para Galdamez mientras crecía. No fue hasta que lo descubrió, hace más de una década, cuando la invitaron a una clase.
“Estaba pasando por un momento difícil”, relató Galdamez. “Empecé a practicar yoga porque buscaba algo que me ayudara en mi proceso de recuperación. Al principio, solo estaba buscando alguna forma de mover el cuerpo. A medida que continué, empecé a darme cuenta de que me estaba ayudando de otras maneras. Me estaba enseñando a tomarme las cosas con más calma, a percatarme de que me estaba manteniendo constantemente ocupada a propósito”.
Cinco años después, comenzó su formación como instructora de yoga y ha estado enseñando desde entonces. Quiso ofrecer un espacio para que la comunidad de Hartford encontrara alivio a través del yoga, tal como ella lo hizo, y eso incluía a personas que, como ella, hablan español.
“Mis padres eran inmigrantes. No hablaban inglés”, explicó Galdamez. “Fui su intérprete y traductora desde que tenía, creo, unos nueve años. Conocer y vivir esas barreras hace que sea aún más importante para mí compartir [el yoga] tanto en inglés como en español”.
Galdamez afirmó que, en la mayoría de los casos, el yoga no es algo que las familias latinas conozcan o practiquen.
“No solo fue difícil para mí encontrar y comprender en qué consiste esta práctica, pero creo que sería aún más complicado para alguien de la comunidad que no habla inglés”, afirmó. “Así que es muy importante llevarlo a comunidades como esta, donde puedan venir simplemente con un mat, o una manta o toalla, y saber que las clases son bilingües, que aquí también hay un espacio para nosotros y que también somos parte de este lugar; que estas prácticas son para nosotros, nos aportan bienestar y además nos están enseñando algo.”
Acceso al yoga para más personas

Yoga In Our City comenzó en el 2012 con una clase de yoga semanal gratuita en Hartford. Desde entonces, ha crecido significativamente, expandiéndose a los parques de Bridgeport, New Haven y Waterbury, con el apoyo de la organización de seguros de salud ConnectiCare.
“El objetivo es hacer que el yoga sea accesible para todos, sin importar tu edad o si has practicado antes”, dijo Kim Kann, vicepresidenta asociada de desarrollo y participación comunitaria en ConnectiCare. “Esta [puede ser] tu primera clase, o [puedes ser] todo un veterano en la práctica”.
Kann mencionó que las clases están diseñadas para permitir que las familias se reúnan, de modo que hasta los niños y los abuelos pueden participar.
Para poder llegar a un público aún más amplio, Kann relató que se hizo necesario contar con instructores bilingües.
“Inicialmente, las clases solo se ofrecían en inglés”, comentó Kann, "pero realmente queríamos asegurarnos de que esto fuera accesible y lograr que participaran personas que quizás nunca habían practicado o nunca lo habían considerado”.
No todas las clases se ofrecen en español ya que esto depende del instructor. Actualmente, hay clases en español disponibles en Hartford, New Haven y Waterbury, resaltadas en verde brillante en el horario de clases. En el caso de Galdamez, al principio de la clase preguntará si alguien necesita traducción al español y la ofrecerá cuando sea necesario.
Según Kann, el ambiente acogedor ayuda a promover otro componente clave del programa: la creación de comunidad.
“Eso es parte del beneficio de ofrecer este programa gratuito en parques de todo el estado: darle a la gente la oportunidad de reunirse y practicar yoga junto a otras personas a quienes podrían llegar a conocer”, dijo Kann. “Hemos visto cómo se han forjado amistades. En clase, la gente se encuentra con las mismas personas una y otra vez. Ha sido una experiencia realmente genial para todos”.
Una práctica positiva

Teresa Rivera suele asistir a las clases de yoga que se ofrecen en los parques de su natal Waterbury, pero comenzó a ir a las clases en Hartford después del trabajo. Un lunes reciente, fue a una clase en Bushnell Park con un compañera de trabajo.
“El ambiente es bastante relajado, sin juicios, abierto, libre [y] simplemente agradable”, confesó Rivera y, mirando a su compañera de trabajo con una sonrisa, añadió, “Se lo dije, ‘se siente bien, ¿cierto?’”.
Esos sentimientos positivos son muy necesarios en las ciudades de Connecticut, expresó Rivera.
“A veces no se oyen cosas positivas sobre la ciudad de Hartford en general. Incluso en mi ciudad natal, Waterbury, a veces no se oyen tantas cosas positivas”, explicó Rivera. “Pero luego, cuando estás allí, se siente que es una comunidad positiva”.
Rivera comentó que aprendió yoga de su mamá, aunque esto causó algo de tensión en su hogar puertorriqueño.
“Crecí en un hogar un poco raro”, compartió Rivera. “Mis padres eran hippies... Mi mamá era muy espiritual, así que siempre hizo yoga. Esto a pesar de que mi abuela era católica, y decía que ‘no, no, no’. [Pero] yo he incorporado un poco de todo lo que me ensenaron mis padres”.
Rivera invita a todo el mundo, especialmente a quienes sienten timidez para comenzar su práctica, a que la acompañen en los parques de la ciudad para hacer yoga.
“¡Vengan, vengan, vengan!”, exclamó Rivera. “Llevo mucho tiempo haciendo yoga. Esto es bastante fácil. Bueno, no es que sea fácil, pero si te preocupa tu nivel [de destreza], es una excelente manera de empezar”.
Más información
La temporada de verano de Yoga In Our City este año se extiende hasta el 12 de octubre.
Ya está disponible el horario de todas las clases de yoga gratuitas que se ofrecen en los parques de Bridgeport, Hartford, New Haven y Waterbury. Las clases resaltadas en verde brillante se pueden ofrecer en español.
Los instructores de Yoga In Our City tendrán una bandera identificativa para que sean fácil de encontrar en el parque.
Se les pide a los participantes que llenen un formulario de exención de responsabilidad antes de asistir a clase.