Paso a Paso, un programa de las Escuelas Públicas de Hartford que recluta maestros de Puerto Rico, comenzó hace tres años. Dos maestros de la isla comenzarán a trabajar en las escuelas del distrito en el otoño.
El programa se creó tras el paso del Huracán María, el cual obligó a muchos niños puertorriqueños a emigrar a Connecticut para continuar su educación luego de la devastación que impactó las escuelas de la isla.
En medio de una escasez de maestros de lenguaje, el distrito de Escuelas Públicas de Hartford quiso desarrollar un programa que respondiera a las necesidades de los estudiantes bilingües.
Delbert Alvarado, un maestro de Español que trabajará en la Hartford Public High School, llegó hace dos semanas con su esposa a Hartford. Alvarado ya se ha encontrado a varios maestros puertorriqueños en la escuela originarios de la isla y de los Estados Unidos. Afirmó que ya puede sentir el espíritu comunitario.
“Nací y me crié en Ponce, Puerto Rico. Venir de un pueblo pequeño y dar este gran paso, este cambio tan grande en mi vida, es ver parte de mis sueños hacerse realidad”, dijo Alvarado. “Aunque vengo desde muy lejos, encontré una comunidad de educadores que comparten mis mismas raíces”.
Ser maestro es un llamado que no puedes ignorar, dijo Alvarado. Descubrió su pasión por la enseñanza de uno de sus profesores universitarios. Comenzó sus estudios en otro campo, pero al ver la dedicación de su profesor y su devoción por conocer la historia de cada estudiante, cambió de opinión sobre lo que quería hacer con su vida.
Para Alvarado, esta será la primera vez enseñando a estudiantes cuya lengua materna no es el español, y comentó que está muy entusiasmado por el desafío.
“Quiero que mis estudiantes descubran nuevas posibilidades y participen de un mundo nuevo que les abrirá puertas”, expresó Alvarado. “La satisfacción más grande que puedo tener es que mis estudiantes dominen un nuevo idioma. Saber español es un superpoder”.
Él quiere pasar los primeros días conociendo a cada uno de sus estudiantes. Está agradecido de acoger a una nueva generación de estudiantes que rechaza los métodos tradicionales de enseñanza. Añadió que también espera poder reinventarse como maestro.
Alexandra Marie Rivera Febres, una nueva maestra de Español en Weaver High School, dijo que estaba acostumbrada a estar rodeada de su familia en Puerto Rico. Mudarse a Connecticut la ha impulsado a adaptarse. Sin embargo, su pasión por la docencia es lo que la ha mantenido en buen ánimo.
“A los puertorriqueños nos gusta estar rodeados de nuestras familias y amigos, y vernos todos los días. Ahora solo hablo con ellos por teléfono o por FaceTime”, dijo.
Rivera Febles es de Carolina, Puerto Rico. Fue maestra durante un año en la isla antes de mudarse a los Estados Unidos para estar con su prometido. Expresó que sus expectativas eran muy diferentes a lo que vive actualmente.
“Venir a los Estados Unidos siempre estuvo en mi mente, pero no sabía que llegaría de esta manera. Es diferente por las leyes, lo que veo en las calles, aquí en la escuela, como en todos los sistemas, y todo es diferente a Puerto Rico”.
Sin embargo, ama estar con sus estudiantes. Siempre había querido ser maestra desde la escuela secundaria.
“El sistema en Puerto Rico es tan diferente, pero ha sido un alivio encontrar un trabajo que me ayude a balancear mi vida personal con todo lo que debo manejar en mi hogar”, dijo Rivera Febres.
Llegó a Connecticut hace más de un mes y reconoce que el cambio no ha sido fácil. Al momento, depende de la comunidad de maestros de su escuela para trasladarse y para ir a comprar sus provisiones.
Aunque nerviosa, también está entusiasmada por la nueva experiencia. Esta será la primera vez que enseña a estudiantes de escuela superior. Las escuelas públicas de Hartford comienzan las clases el 29 de agosto.
“Estoy entusiasmada de conocer a los estudiantes. Es una nueva era, una nueva generación. Mis expectativas son grandes y espero que todo salga bien”, dijo Rivera Febres.
Muchos maestros se han marchado de Puerto Rico debido a los salarios bajos. El salario mínimo de $1,750 al mes no ha cambiado en los últimos 13 años. Alrededor de 13,000 puertorriqueños se mudaron a Connecticut después del Huracán María.
En febrero de 2022, los maestros recibieron un aumento de $1,000 en su salario. El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, busca que el cambio sea permanente.
Daisy Torres-Hill, superintendente auxiliar interina a cargo del desarrollo profesional y los alumnos multilingües del distrito de Hartford, comentó que esto pudo haber contribuido al bajo número de solicitudes para este año escolar. En el 2022, reclutaron a 14 maestros, mientras que este año solo reclutaron dos.
Con la ayuda de Caribbean Connection, un programa dedicado a contratar maestros de todo el Caribe, el distrito espera continuar su reclutamiento de maestros que puedan identificarse con sus estudiantes.
Torres-Hill dijo que “el hecho de que nuestros estudiantes puedan ver en los maestros un reflejo de quiénes son, en términos del lenguaje, es muy importante para ellos, ya que sobre 55% de nuestra población se identifica como latina o hispana”.