Funcionarios de Connecticut dan a conocer más detalles sobre el impacto que la política de gastos e impuestos del presidente Donald Trump tendrá en las aportaciones del estado al Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP, por sus siglas en inglés).
En un memorando reciente, el Secretario de la Oficina de Política y Gestión, Jeff Beckham, indica que su oficina aún no tiene una comprensión exhaustiva de los impactos del proyecto de ley federal en Connecticut, y advirtió que más cambios podrían estar por venir antes de la próxima sesión legislativa que comienza en febrero.
"Aunque esta ley contiene muchas disposiciones que tendrán una repercusión directa en las finanzas estatales, esta no será la última acción federal que probablemente se lleve a cabo", afirmó el memorando del 8 de agosto a los legisladores estatales.
Mientras que aún no queda del todo claro el alcance total que los drásticos recortes federales tendrá en el presupuesto de Connecticut, ya se empieza a conocer el impacto local de los cambios federales al SNAP.
La OPM ahora estima que el costo de administrar el SNAP será de $32 millones adicionales para Connecticut en el año fiscal 2026, y de casi $43 millones adicionales anualmente a partir del año fiscal 2027. El proyecto de ley federal modificó la responsabilidad de los costos administrativos, que pasó del 50% al 75%.
Pero los costos no acaban ahí. Según un estimado de la OPM, los cambios federales también implican que Connecticut pagaría unos $130 millones adicionales anualmente para el beneficio de alimentos. Esto se debe a que la ley federal exige que los estados con altos índices de error en los pagos, como Connecticut, ahora contribuyan a financiar el beneficio a partir de octubre de 2027.
¿Qué le espera al SNAP?
Es probable que en las próximas semanas la OPM ofrezca propuestas para abordar las futuras finanzas del estado, al menos durante los próximos años.
Esas sugerencias podrían desempeñar un papel en una próxima sesión especial, y de cara al futuro. Antes de que finalizara la sesión ordinaria de 2025, la mayoría legislativa de Connecticut dijo que necesitaría convocar una sesión extraordinaria para abordar los recortes federales. Se espera que los legisladores vuelvan a reunirse en otoño.
En todo el país, los recortes federales significan que menos personas recibirán beneficios del SNAP. Según un análisis realizado el lunes por la Oficina de Presupuesto del Congreso, se calcula que 2.4 millones de personas menos al mes participarán en el SNAP entre 2025 y 2034. Esto se debe a que hay nuevas normas de elegibilidad para el SNAP, incluidos requisitos de trabajo ampliados.
Esos nuevos requisitos entran en vigor el 4 de julio, pero cuando se preguntó el miércoles sobre la aplicación de los nuevos requisitos, un portavoz de la OPM de Connecticut declaró que "el gobierno federal no ha proporcionado orientación adicional".
El informe de la oficina del contralor del estado, publicado en julio, afirmaba que los recientes cambios federales afectarán a casi 400,000 residentes de Connecticut que reciben actualmente el beneficio alimentario.
"Se trata de personas que literalmente dependen de SNAP para comer, una de las cosas más fundamentales para nosotros como seres humanos", dijo el Contralor Sean Scanlon.
Sujata Srinivasan, de Connecticut Public, contribuyó a este reportaje.