El miércoles por la noche llegó a su fin otra sesión legislativa en Connecticut.
A la fecha del martes, el gobernador Ned Lamont había promulgado 20 medidas legislativas.
Varios proyectos de ley se hicieron sal y agua en los calendarios de la Cámara y el Senado, pero muchos murieron por inercia cuando la Asamblea General concluyó su calendario constitucional a medianoche.
Los miembros del Senado dedicaron gran parte del martes a deliberar sobre el acuerdo presupuestario bienal del estado antes de aprobarlo a última hora de la tarde del martes. La medida ya fue aprobada en la Cámara de Representantes, básicamente siguiendo las líneas partidistas. El conjunto de medidas pasa ahora a Lamont para su firma.
Pero las negociaciones presupuestarias no concluirán durante la sesión ordinaria. Los líderes demócratas de la Cámara de Representantes dicen que será necesario celebrar una sesión especial más adelante este año para responder adecuadamente a los drásticos recortes de la administración Trump en materia de salud pública, así como a los recortes anticipados en el Congreso a las ayudas federales, como Medicaid y asistencia nutricional.
He aquí algunos de los puntos destacados, incluida la situación de algunos de los principales proyectos de ley en el último día de la sesión legislativa.
Legisladores aprueban acuerdo presupuestario a 2 años
El acuerdo por $55,800 millones que los líderes legislativos demócratas dieron a conocer a primera hora del lunes incluye un aumento en los reembolsos de Medicaid para los proveedores. También aumenta el crédito contributivo estatal por ingresos para familias de bajos ingresos que tienen hijos, pero no incluye el crédito fiscal por hijos para la clase media, algo que muchos esperaban que se incluyera.
Además, financia una de las prioridades de Lamont en esta sesión: destinar cientos de millones de dólares del superávit para fortalecer a largo plazo el sistema de cuidado infantil del estado, que se encuentra en crisis. Aunque en un principio se concibió como un plan de educación preescolar gratuita, el plan final incluye también una expansión para el cuido de bebés y niños pequeños.

El presupuesto también incluye $60 millones adicionales para los próximos dos años, destinados a reforzar los servicios de educación especial en los distritos escolares. Vincent Candelora, líder de la minoría republicana en la Cámara de Representantes, vio esto como un factor positivo aunque expresó preocupación por los gastos excesivos en el presupuesto, que, en su opinión, darán lugar a mayores impuestos a largo plazo.
En una conferencia de prensa celebrada el jueves tras la sesión, Lamont dijo sentirse satisfecho con la sesión y con el presupuesto estatal.
“Creo que es un presupuesto que marcará una gran diferencia”, afirmó Lamont, quien destacó las iniciativas para los niños pequeños como la parte más importante del conjunto de medidas.
El gobernador rechazó las críticas de que el presupuesto ignoraba o pasaba por alto las restricciones fiscales del estado.
“¿Cuál es el límite de gasto? Ya sé que lo suelen ver como un límite inquebrantable. Pero no, no lo es”, sostuvo Lamont. “En pocas palabras, se trata de la premisa básica de que tus gastos no pueden aumentar más rápido que tus ingresos. Por primera vez en mucho tiempo, nuestros ingresos están aumentando, nuestra economía está creciendo y nos va mejor que a nuestros vecinos. Eso nos permite gastar más y aún así mantenernos dentro de un presupuesto honesto y equilibrado”.
Además, añadió, “Eso es lo que hemos hecho en este presupuesto, y me siento orgulloso de lo que hemos logrado”.
En cuanto a la posibilidad de que Lamont vuelva a postularse para gobernador, el jueves dijo que no podía dar una fecha concreta para su posible anuncio. Lamont había dicho anteriormente que tomaría una decisión en algún momento después de concluir la sesión legislativa, pero sí dejó claro que ahora es más probable que se postule para un tercer término que hace un año.
“Lo estoy considerando seriamente. Me encanta este trabajo”, declaró Lamont. “Creo que hemos logrado un progreso extraordinario si lo comparamos con nuestra situación hace, digamos, diez años. Creo que [la vicegobernadora] Susan [Bysiewicz] y yo formamos un muy buen equipo”.
“Si me hubieran preguntado hace un año, hubiese dicho: ‘No. Me parece que el estado va por buen camino. Hemos estabilizado las cosas. Estamos creciendo de nuevo. Es hora de ceder el mando’”, confesó Lamont. “Pero este momento también es increíblemente complicado. Ya sabes, empezando por toda la incertidumbre en Washington, la posibilidad cada vez mayor de que se produzca una recesión. Quizás sea un momento en el que la experiencia marca la diferencia. Pero eso no es un sí ni un no; es una forma de decir que lo estoy pensando seriamente”.

Proyectos de ley abordan causas –y soluciones– del cambio climático
Dos proyectos de ley prioritarios que abordan la crisis climática obtuvieron la aprobación definitiva antes de que concluyera la sesión de este año. Esto surge tras otro año de temperaturas e inundaciones récord, además del fracaso de varias políticas climáticas fundamentales que no obtuvieron la aprobación de ambas cámaras de la Asamblea General de Connecticut en 2023 y 2024.
Una medida obtuvo la aprobación final en el Senado el miércoles por la tarde, aprobada principalmente siguiendo líneas partidistas. Esta se centra en mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero provocadas por el ser humano mediante la actualización de la Ley de Soluciones para el Calentamiento Global para tratar de alcanzar cero emisiones netas en 2050, así como en fomentar la creación de empleos locales y el uso de energías renovables.
El otro proyecto de ley se orienta más hacia la resiliencia climática. Este se aprobó en ambas cámaras y ahora espera la firma del gobernador, que también declaró la resiliencia como una prioridad para este año.
La medida incluye requisitos de información sobre el riesgo de inundación de las viviendas y “distritos de resiliencia” para ayudar a las ciudades a financiar sus proyectos de mitigación. También exige la actualización de los planes estatales de mitigación de riesgos y soluciones basadas en la naturaleza para hacer frente a los efectos del cambio climático.
Medida energética bipartidista busca reducir costos a corto y largo plazo
La “Ley de contribuyentes primero” obtuvo el martes la aprobación final en la Cámara de Representantes, después de que el proyecto fuera aprobado por el Senado con un apoyo casi unánime a principios de semana. Esta medida ambiciosa pretende reducir los costos de electricidad de los residentes de Connecticut y realizar inversiones para mejorar la tecnología de la red eléctrica del estado y la red de transmisión con el tiempo.
Con este proyecto de ley, los contribuyentes podrían ahorrar al menos $350 millones al año. Los republicanos esperaban realizar más recortes en la sección de beneficios públicos y sufragar esos recortes con el presupuesto estatal. Algunas partes del proyecto de ley sobre beneficios públicos se están financiando mediante bonos estatales, como la protección para residentes en dificultades y el programa de recarga de vehículos eléctricos.
La medida también invierte en nuevas fuentes de energía, como un programa de subvenciones y préstamos para redes de energía geotérmica. También hay $5 millones reservados para la preparación de centrales de energía nuclear, una fuente que Lamont mencionó que ampliaría, durante su discurso del estado del estado.
Reforma de vivienda se aprueba en proyecto de ley partidista
La semana pasada, los legisladores dieron su voto final al proyecto de ley ómnibus que se elaboró en respuesta a la escasez de viviendas en el estado. La medida pretende cambiar las normas de zonificación y proponer formas de aumentar el número de viviendas. Esta también pretende mejorar la asequibilidad de la vivienda.
El proyecto de ley incentiva a los municipios a desarrollar viviendas cerca de las redes de transporte público. Las ciudades con más de 15,000 habitantes también deberán crear una comisión de alquiler justo.
La medida también busca ayudar a las personas sin hogar, lo que incluye prohibir a los municipios y ciudades instalar elementos arquitectónicos en espacios públicos que impidan a las personas recostarse o sentarse.
Legisladores debaten sobre salud, regulan niveles de flúor y eliminan centros de prevención de sobredosis
Los legisladores de Connecticut también aprobaron diversas medidas en torno a la salud pública y el acceso a la atención médica. Varias medidas responden a cambios en las recomendaciones federales en materia de salud, como la cantidad actual de flúor en los suministros públicos de agua. También crea un fondo de seguridad que podría financiarse con subvenciones privadas —no con fondos estatales— para apoyar a organizaciones sin fines de lucro que prestan servicios de salud reproductiva o de afirmación de género.
Una disposición ratifica una ley que garantiza atención médica de emergencia para abortos a pacientes embarazadas en el estado. El proyecto de ley se aprobó el martes como parte de la medida de ejecución presupuestaria, el mismo día en que la administración Trump anunció que revocaría las directrices de la era Biden para realizar abortos de emergencia.
Los demócratas de la Cámara habían enmendado el proyecto del Senado para eliminar los centros de prevención de sobredosis. Estos programas permiten que las personas con trastornos por consumo de sustancias tomen medicamentos controlados de forma segura bajo supervisión médica. A finales de la semana pasada, el presidente de la Cámara de Representantes, Matt Ritter, dijo a la prensa que Lamont hubiese vetado la medida si llevaba esa disposición incluida.
Chris Polansky, de Connecticut Public, ha contribuido a este reportaje.